Invasión de Bichitos Negros o Trips en Buenos Aires

En los últimos años, Buenos Aires ha sido víctima de una invasión de pequeños insectos negros conocidos como trips, que no solo afectan a las plantas, sino que también pueden picar a los humanos. Esta situación ha generado gran preocupación entre los residentes de la ciudad, ya que estas picaduras pueden ser dolorosas y causar irritación en la piel.

Los trips son insectos chupadores de savia que se alimentan de las hojas de las plantas, pero algunos tipos de trips también pueden picar a los humanos. Estos trips que pican al humano se alimentan de la sangre de las personas y otros animales, y aunque no transmiten enfermedades, sus picaduras pueden ser muy molestas. El nombre científico de estos insectos es Caliothrips phaseoli pertenecientes al género Thysanoptera. Los trips adultos son de color gris oscuro casi negro y miden poco más de 1 milímetro de longitud.

Muchas personas sufrieron el malestar y la picazón que les generó la presencia de estos insectos, ya que con motivo del excesivo calor comenzaron a diseminarse y a subirse a todos lados.
Es común su presencia en palomas y otras aves.

La invasión de trips que pican al humano en Buenos Aires se debe en gran parte al cambio climático y a la falta de medidas de control efectivas. Las temperaturas más cálidas y los inviernos más suaves han permitido que los trips se reproduzcan y se extiendan más fácilmente. Además, la falta de depredadores naturales y la falta de medidas de control efectivas también han contribuido a su propagación.

Las picaduras de trips pueden ser dolorosas y causar irritación en la piel, con síntomas como enrojecimiento, hinchazón, picazón y dolor. Aunque no transmiten enfermedades, las picaduras de trips pueden ser particularmente problemáticas para personas alérgicas o sensibles a las picaduras de insectos.

Para prevenir las picaduras de trips, es importante tomar medidas de prevención, como evitar áreas donde se sabe que hay una infestación de trips, usar repelente de insectos y vestir ropa protectora. Además, se recomienda el uso de insecticidas ambientales. Entre los métodos para combatir esta plaga se encuentran el jabón potásico pulverizado y las trampas cromáticas (trozos de plásticos de colores vivos pintados con aceite).

Si ya se ha producido una picadura de trips, se recomienda aplicar compresas frías para reducir la hinchazón y el dolor, así como antialérgicos para aliviar el dolor. En casos graves, se puede requerir atención médica para tratar la picadura y prevenir infecciones.

En conclusión, la invasión de trips que pican al humano en Buenos Aires es un problema serio que requiere atención inmediata. Es importante tomar medidas de prevención y usar de productos insecticidas ambientales para el control de trips, además del control de la excesiva población de palomas en la ciudad. Además, es fundamental abordar las causas subyacentes de la invasión de trips, como el cambio climático y la falta de medidas de control efectivas. Solo con un enfoque integral y una cooperación activa entre los residentes, las autoridades locales y los expertos en control de plagas, podemos esperar controlar esta invasión de dichos insectos y proteger nuestra salud y bienestar.